Hace unos 2700 años, Arquíloco de Paros compuso uno de los primeros ejemplos de poesía erótica de la antigua Grecia. Y ese poema se perdió después durante siglos. Pero en los años setenta se descubrió, entre las envolturas de una momia egipcia, un trozo de papiro que contenía sus últimos versos…
Y tomando a la doncella,
la recosté sobre las flores, y cubriéndola
con un suave manto, sosteniendo su cuello entre mis brazos,
mientras temblaba de miedo como un cervatillo ante el lobo,
acaricié delicadamente sus pechos con mis manos
donde la piel mostraba el tierno encanto de su juventud.
Y abrazando su hermoso cuerpo,
liberé el blanco vigor acariciando sus rubios cabellos.
Como sabe cualquiera que haya visto la estupenda 300, un guerrero griego no abandona jamás su escudo. Pero Arquíloco se jacta, en uno de sus poemas, de haberlo hecho para salvar la vida. Arquíloco, el primer lírico griego del que tenemos noticia, representa la ruptura de los ideales heroicos, los de la épica, los de Homero. A menudo se dice que, con él, la individualidad irrumpe en la poesía griega; ya no estamos ante las hazañas de otros, ante poemas que hablan de un glorioso pasado común: Arquíloco habla de sí mismo, de su vida, de sus andanzas militares y sus amoríos.
Debió de nacer a comienzos del siglo VII a. C., hijo bastardo de un noble y una esclava. Emigró de su tierra, se ganó la vida como mercenario; estuvo a punto de casarse con Neóbula, pero el padre de esta rompió el compromiso y Arquíloco arremetió contra toda la familia en sus versos con tal ferocidad que, según la leyenda, Neóbula acabó suicidándose. Así que Arquíloco era un mercenario exiliado y bastardo al que dieron calabazas: un antihéroe.
El fragmento que acabamos de leer es solo el final del poema, que representa a Arquíloco seduciendo a una joven muchacha. Tras un diálogo plagado de ambigüedades, sobre el que tanto se ha escrito, Arquíloco lleva a la mujer hasta un jardín y allí tiene con ella cierta relación erótica. Comienza recostándola entre las flores, la cubre con un manto (¿para ocultar lo que va a ocurrir?), acaricia sus pechos, abraza su cuerpo y… no nos dice más; se limita a indicar que el acto ha concluido mencionando la eyaculación: «liberé el blanco vigor [o el «alma blanca»] acariciando sus rubios cabellos». Y lo hace adrede; por otros de sus fragmentos sabemos que Arquíloco no tenía problema en emplear un lenguaje más explícito. Pero quiere aquí, tal vez para continuar con el tono elusivo del poema, dejarlo a la imaginación del oyente. Y de nosotros, que leemos, 2700 años después, esta magnífica poesía erótica de la antigua Grecia.
Si te ha gustado esta poesía erótica de la antigua Grecia, te gustarán:
LIBROS: LOS POEMAS DE AMOR MÁS ANTIGUOS DEL MUNDO
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BIBLIOGRAFÍA
Podéis leer este y otros poemas de amor arcaicos en mi libro Los poemas de amor más antiguos del mundo. Son interesantes, además, las siguientes obras:
ESLAVA GALÁN, J., Amor y sexo en la antigua Grecia, Madrid, Planeta, 1997.
LUQUE, A., Los dados de Eros: Antología de poesía erótica griega, Madrid, Hiperión, 2000.
RODRÍGUEZ ADRADOS, F., Lírica griega arcaica (Poemas corales y monódicos, 700-300 a. C.), Madrid, Gredos, 1980.
—Sociedad, amor y poesía en la Grecia antigua, Madrid, Alianza, 1995.
Me ha encantado. Gracias
¡Gracias a ti!
Sumamente agradecido por estas imagenes ancestrales que nos comunican con un presente comun.
Gracias, Miguel.
Me deleito muchísimo con estos correos sobre poesía erótica antigua, ¡gracias!
Eso me alegra mucho. Gracias a ti.
Muchas gracias Eduardo.
De nada.
Gracias Edo.por compartir tus descubrimientos… Sigiue adelante. Bendiciones. ¡Y la Vida… Vencerá!!!
Para mí es un placer. Mientras siga interesando a alguien y yo tenga tiempo para ello, seguiré, no te quepa duda. ¡Gracias!
Gracias por compartir. Gracias por su tiempo.
Un placer.
Buena idea esto ayuda ya que aveces no se tienen los libros a la mano.adelante.
Seguiremos, claro. ¡Gracias!
Pues para mí fue toda una cátedra sobre poesía erótica. Gracias.
¡Gracias!
Sutil y maravilloso. ¡Gracias!
¡De nada!
Bonito texto y buen análisis del autor.
Muy interesante la experiencia de trasladar la imaginación a tantos años atrás.
Y,nuevamente,me sorprendés,Eduardo!!!!!
¡Jajaja! Me alegro mucho.
No había leido antes un poema erótico de la Antigua Grecia, me desestructuro e hizo pensar en ellos , habrá más?
Pues sí, hay bastantes más.
Estoy encantada por recibir toda esta maravilla de la antigüedad. Gracias
Me agrado aprender, gracias por compartir tus conocimientos felicidades.