Yo dormía, pero mi corazón velaba.
Oí a mi amado llamarme:
«Ábreme, amada mía, compañera mía,
paloma mía, perfecta,
pues mi cabeza está empapada de rocío,
mis cabellos del sereno de la noche».
«Ya me he quitado el vestido;
¿cómo ponérmelo de nuevo?
Ya me he lavado los pies;
¿cómo volver a ensuciarlos?».
Mi amado metió la mano por la abertura
y mis entrañas se conmovieron por él.
Me levanté para abrir a mi amado,
mis manos goteando mirra,
mis dedos mirra fluida,
sobre el pomo de la cerradura.
Abrí a mi amado,
pero mi amado se había marchado, se había ido,
y mi alma se fue tras él.
Aunque muchos intérpretes hayan tratado de obviarlo, resulta evidente que hay erotismo en el Cantar de los Cantares. No tan explícito como en los poemas sumerio, egipcio y griego que hemos leído estas últimas semanas, pero ahí está. Lo que ocurre es que el erotismo en el Cantar de los Cantares se presenta de manera oblicua, ambigua, simbólica. Pero esto no lo apaga, como vamos a ver. Preparaos porque este pasaje, mi favorito al respecto, tiene miga.
Las dos primeras estrofas parecen claras: la muchacha dormita en su cama, el amado llama a la puerta y ella pone excusas. A continuación tiene lugar algo extraño: él mete la mano por cierta abertura, ella se conmueve, se levanta a abrirle, sus manos gotean mirra, y el amado ya no está. ¿Qué es lo que ha ocurrido? Vayamos poco a poco.
«Yo dormía, pero mi corazón velaba», dice la mujer. A partir de estas primeras palabras, algunos han entendido que todo lo que sigue es, en realidad, una fantasía, una ensoñación de la muchacha. Por eso todo es tan raro. Pero parece que el hombre se ha marchado de verdad. ¿Se iría el alma de la joven tras él si todo hubiera sido un sueño? ¿O despertaría aliviada? Porque, después de los versos que hemos leído, ella recorre la ciudad buscándole y pide a las hijas de Jerusalén que le transmitan un mensaje de amor si le encuentran. Si esto es un sueño, todo el Cantar es un sueño. No quiero decir que no haya ensoñación en absoluto; me parece, de hecho, que lo soñado se mezcla con lo real, y el plano literal con el metafórico, y los símbolos apuntan en múltiples direcciones. De ahí la densidad del pasaje, su atmósfera misteriosa, el extrañamiento que genera.
El amado llega ante la puerta de la muchacha y pide que le deje entrar. Este, como decíamos en el comentario a un antiguo poema chino, es un motivo que se repite en la poesía amatoria a lo largo y ancho del espacio y del tiempo. El joven emplea dos estrategias clásicas para conseguir lo que pretende: piropea a la muchacha (amada mía, paloma mía, perfecta) y apela a su compasión: «mi cabeza está empapada de rocío»; estoy aquí, a la intemperie, mojado, de noche. Obviamente, no busca un refugio de las inclemencias meteorológicas; «pues vete a tu casa», podría decir ella; «¿qué haces a estas horas por ahí?».
Que la escena tenga lugar durante la noche es una de las claves. Ya hemos dicho que los amantes deben esconderse de sus familias y del vecindario para entregarse al amor, y la noche, cuando todos descansan, es el momento idóneo. Por eso, en los poemas amatorios de tantas culturas, la unión tiene lugar durante la noche. Pero hay más; en las palabras del muchacho encontramos el primer doble sentido: «mi cabeza está empapada de rocío». Parece que en la poesía mesopotámica la cabeza es metáfora del sexo masculino, y esta imagen pudo pasar al cercano mundo hebreo. La cabeza empapada de rocío aludiría a la excitación sexual del muchacho. El problema ya no sería, entonces, la llovizna nocturna, sino la necesidad de satisfacer sus deseos; en este sentido, «ábreme» no significaría solo «abre la puerta», sino también «ábrete a mí». Un primer elemento erótico.
Pero ella se muestra reticente: «Ya me he quitado el vestido, ya me he lavado los pies». ¿Por qué? Sabemos que le ama, ¿por qué no corre a abrirle? ¿Tiene miedo de que los descubran? ¿La asusta la unión erótica? Pero esta ya parece haberse producido antes. ¿O es que el poema no sigue un orden cronológico? ¿Está enfadada porque él llega tarde? ¿Se está haciendo de rogar? Jesús Luzarraga opina que ella no se está negando, sino, precisamente, asegurando recatadamente que se encuentra dispuesta: se ha quitado el vestido y se ha lavado, es decir, se ha preparado para unirse a él. Lo que pasa es que está tan poseída por el amor que no acierta a actuar, como la mujer del poema egipcio, tan enamorada que no era capaz de maquillarse ni vestirse. No termina de convencerme esta interpretación, pero ahí queda.
Llegamos a los versos más explícitos, y también más extraños, ejemplo perfecto del erotismo en el Cantar de los Cantares: él mete la mano por la abertura y las entrañas de la muchacha se conmueven. ¿Qué abertura? La de la puerta, se apresuran a decirnos los comentaristas más recatados; hay una abertura en la puerta a través de la cual poder ver a quien llama, y el muchacho ha metido la mano tratando de abrir. Sin duda el poeta pensaba en eso también. Pero, ¿solo en eso? ¿Conmovería eso las entrañas de la joven? Tengamos en cuenta, además, que «mano» es metáfora del miembro viril en otros lugares de la Biblia.
Por fin, ella se levanta para abrirle, y sus manos gotean mirra sobre el pomo. «Se ha perfumado antes de acostarse», nos dicen algunos, o «unta la cerradura con mirra para que no haga ruido». El problema de estas interpretaciones meticulosamente realistas es que el pasaje es completamente irreal. La misma situación parece absurda: ¿dormiría una joven en una habitación con acceso directo a la calle? No parece creíble. Entonces, la mirra nos habla de varias cosas y de todas a la vez: de la atmósfera suntuosa que rodea a los amantes (la mirra era un producto caro), de perfumes agradables, de disponibilidad para la unión y de los fluidos sexuales que intervienen en ella. Digo que nos habla de todas estas cosas a la vez porque eso es exactamente lo que ocurre; no es que la mirra sea una metáfora de los flujos vaginales; interpretar estos textos en busca de claves más o menos ocultas que revelarían su verdadero significado me parece errar el tiro. Por eso me gusta, siguiendo a Stephen Reckert, hablar de simbolismo; el Cantar no apela tanto a nuestro intelecto cuanto a nuestra capacidad asociativa y emocional. Así, cuando leemos mirra en este contexto, debemos dejar que el término despliegue toda su carga semántica: perfume, bálsamo, riqueza, lubricidad (en todos sus sentidos), y asumirla sin mayores análisis, porque esto es un poema (y un poema antiguo) y no un tratado. Esta es la clave para entender el erotismo en el Cantar de los Cantares.
Finalmente, la joven abre, pero su amado se ha ido. ¿Ha tardado demasiado? ¿Había imaginado, entre sueños, la llamada, y entre sueños se había excitado y confundido abertura y sexo, mano y falo, mirra y flujo sexual? No importa: la potencia de la escena, su polisemia, su encantadora ambigüedad son más sugestivas y más poéticas que una clara exposición de los hechos.
Me parece que este es el comentario más largo y exigente que he publicado aquí. Pero creo que el texto lo merece. ¿A alguien le importa decirme si se ha entendido?
Si te ha gustado este ejemplo de erotismo en el Cantar de los Cantares, te gustarán:
LIBROS: LOS POEMAS DE AMOR MÁS ANTIGUOS DEL MUNDO
VIAJES: CUATRO FALOS EN NÁPOLES
POESÍA ERÓTICA DE LA ANTIGUA GRECIA
BIBLIOGRAFÍA
Podéis leer este y otros poemas de amor arcaicos en mi libro Los poemas de amor más antiguos del mundo. Son interesantes, además, las siguientes obras:
FOX, M. V., The Song of Songs and the Ancient Egyptian Love Songs, Wisconsin, University of Wisconsin Press, 1985.
LUZARRAGA, J., Cantar de los Cantares: Sendas del amor, Estella, Verbo Divino, 2005.
MORLA, V., Poemas de amor y deseo: Cantar de los Cantares, Estella, Verbo Divino, 2004.
SCHÖKEL, L. A., Cantar de los Cantares, Estella, Verbo Divino, 1990.
muy claro, preciso. Fundamental el anàlisis literario. Clarifica y presenta al poema dìafano
La casa es un templo, es el cuerpo. Hermoso Cantar y su interpretación. Gracias.
Gracias a ti.
¡Gracias!
El erotismo lo pones tú pero es HERMOSISIMO. Gracias por explicarlo de esta manera. Me encantó.
Tus interpretaciones son interesantes como geniales. Coincido con ellas.
Muchas gracias, Claudia.
Me gusta el Cantar de los Cantares precisamente por esta forma tan sutil que tienen los amantes de expresarse bellos versos de amor. Creo que fue incluido en la Biblia por su relación teológica (Cristo y la Iglesia) que por su riqueza poética como tal (hombre-mujer amándose).
Y, ¿Qué si es erótico? ¡POR SUPUESTO QUE SÍ!
Y eso es lo más significativo dado el contexto cultural; considerar a la mujer co- partícipe, validando su opinión ya me revoluciona, que el «señalado entre diez mil» le dé importancia a los versos enamorados de ella lo hace estremecedor y encantador.
En cuánto a la ambigüedad de la muchacha, tal vez dudaba darse al placer debido a un arrebato de celos más que al temor de ser descubiertos, al menos así he sentido al leerlo (su amante era codiciado por las mujeres).
Y por último, por supuesto que se entiende y se agradece el análisis que realizas del texto. Como decimos en Chile ¡Eres seco!
(Dícese de una persona que se destaca por su brillantez y/o elocuencia).
Saludos ?
Muchas gracias, Débora. A mí me parece interesantísimo que este poema esté en la Biblia. Cierto que el amado era codiciado por las mujeres. Pero ella se muestra muy segura de él: «mi amado es para mí y yo soy para mi amado», dice. Pero el texto es tan complejo que… quién sabe.
Mi amado es él señor
La amada es la iglesia
El es deseado por muchas
Pero sólo ella es (la amada) del señor..
Sí, esa es la interpretación alegórica.
Quien busca a la amada es él, Dios manifestado a los hombres, y la amada, grupo de personas que lo esperan para intimar en una relación espiritual, criatura-creador.
“Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.”
S. Mateo 5:3
Me encanto todo lo que acabsiquiera: me declaro una persona sin estudio u una adecuami minima educacion, almenos aquella que maravillosamete entregan las letra, pero aun así cada vez que puedo, trato de mirar por la cerradura, aquel maravilloso mar que afortunadamente, nos han contruido, aquellos que manejan la pluma cual si fuera un dedo índice o una varilla en las manos de un padre corrector. Maravillosas las letras gracias por acercarnoslas a aquello que por distintos atares no emos podi tener un romance con ellas ni siquiera algun pequeño coqueteo, poro cual si si fuera esa hermosa chica con que alguna vez nos crusamos por la calle, y nos flecho, penetrando profundamente…
Perdon; he notado unos errores en la redaccion de mi comentario, quiese editarlo, pero el sistemas no medio esa opcion. Mil disculpas
Esa es mi idea, Eladio: compartir los poemas y tratar de explicarlos de modo que cualquiera pueda disfrutar de ellos. ¡Un placer!
??????
Me ha gustado porque está enfocado desde las múltiples posibilidades que ofrece el texto. La textos bíblicos no son nada fácil de interpretar.
Saludos, amigo.
¡Muchas gracias! ¡Saludos!
Me fascina este libro. Ya lo habia estudiado. Sin embargo, hay unos datos en su anáiisis que describen muy bien, a mi entender, el mensaje que desea llevar este libro al lector. Gracias por compartir su interpretación.
Me gustó mucho la explicación!!
¡Me alegro mucho!
Precisa y preciosa su lectura Gracias a usted por darnos poesia en tiempos tan aciagos
Lo menos que se puede decir es que es sublime. Además tu comentario es certero y clarificador. Gracias.
¡Gracias!
Nunca me había puesto a pensar en este contexto el cantar de los cantares, hermoso se me hizo tu explicación, hoy lo leeré y sé que será con esta perspectiva bella, gracias.
Es una alegría para mí eso que dices. ¡Un placer!
Hasta ahora he leído esta reflexión sobre el Cantar de los Cantares y me ha parecido genial! Gracias por ayudarnos a ver con nuevos ojos y mente abierta.
Saludos!
Es un placer, Ana.
Hola Eduardo! para mí es absolutamente explícito,y,me encanta!Gracias!
El erotismo es claro, sí. ¡De nada!
Ella tiene una experiencia más allá del placer físico (entrañable) de dos cuerpos que aún intimando (él traspasa, ella humedece) se encuentran separados por una puerta (el límite de sus cuerpos) en dos ambientes distintos. Ella en un momento llega a tal extásis que abre la puerta (comunión) y sale al mundo (se asoma al otro) buscando el verdadero placer de superar la soledad.
¡Fantástico! Pero el amado se ha ido… ¿Tal vez no se abre como ella?
«Abrí a mi amado,
PERO mi amado se había marchado, se había ido,
y mi alma se fue tras él.»
El «pero» es el que me dificulta saberlo.
Sí se elimina, para mí, mí interpretación, mí formado prejuicio sobre el poema, fluye mejor en su significado.
Lo que digo es especulativo e intuitivo.
El PERO la detiene en la puerta y la hace separarse del amado, se pierden.
Sin el PERO ella ve que el amado ya no está en la puerta pues ya inicio la experiencia del extásis y ella (su alma) va en pos de él.
Me hace más sentido la segunda.
De hecho, Luzarraga traduce un verbo que parece significar «girar, voltearse» por «entrar girando». O sea, que el amado no se marcha sino que entra. Pero inmediatamente después ella se pregunta dónde está el amado y sale a recorrer la ciudad en su busca. ¿Por qué, si él ha entrado? Parece que no encaja… Por eso, supongo, la traducción habitual es que él se ha alejado.
Ella evidentemente le sugiere que se quede,es pra’cticamente una s’uplica,le manifiesta su disposicio’n,lo insta a que no exista modo de negativa……
El pasaje del Cantar no hace alusión a ninguna puerta, por lo tanto la puerta no existe, poner la puerta es simplemente no ver la escena, ella se halla tendida en su lecho y escucha la voz del amado, anteriormente Sulamita le había hecho una invitación para entrar, el nardo había sido esparcido precisamente como una invitación , que se esparzan mis aromas y ¡¡entre mi amado¡¡, el amado dice: Entrare en mi huerto y recogeré mi mirra, es entonces cuando se presenta y Sulamita escucha la voz del amado. Abreme, el amado por la pequeña »invitación» a entrar que le había hecho ella al esparcir sus aromas puede por esa pequeño agujerito ya tender su mano y hacer vibrar sus entrañas, ¡¡le esta diciendo que esta enamorado de ella¡¡¡la frase es esta en su texto original: »Mi amado tendió su mano por el agujero y mis entrañas dieron un bramido por amor de el», así es la contundente frase de Sulamita, ya no escucha su voz sino que ahora le siente en sus entrañas, todos sabemos como nos revolotean las mariposas cuando estamos enamorados, esto es lo que le pasa a Sulamita: Esta sintiendo las mariposas del amado en sus propias entrañas, dice »mis entrañas braman por el amor que siente hacia mi», son depositadas estas mariposas del amado en el vientre de Sulamita, la mano nos sugiere otra intimidad, la esta »tocando» por eso ella dice: »Su deseo tiende hacia mi», ella se dispone entonces a levantarse de su lecho y nos dice destilan mirra mis manos, esta mirra es precisamente lo que el amado viene a recoger, y con esta mirra le abre de par en par el huerto, abrí yo a mi amado y mi amado había ya pasado.. ¡¡¡al huerto¡¡¡¡, paso completamente para dentro del huerto, le abrió de par en par sin siquiera darse cuenta y el amado ahora ya medio beodo exclama: he recogido mi mirra destilada por sus manos y con esta mirra mi amada me abrió de para en par el huerto, he recogido mi mirra ¡¡comer y beber y embriagaros oh amados¡¡¡el amado se metió de lleno en el huerto, de hecho ella sale como una exalacion tras su »decir», este »decir» o tras este »hablar» es lo que le brama como un ciervo joven en sus entrañas,ese bramido fue hecho cuando Sulamita le dejo un agujerito por donde el amado pudo tender su mano, ¡¡como sera ese bramido una vez abierto el jardín de las delicias¡¡ Sulamita nos dice: Mi amado paso ( para el huerto) le grito pero no me contesta a lo que me ha dicho, la búsqueda es precisamente porque el amado »tendió su mano» y sus entrañas bramaron , gritaron, se conmocionaron y ella sale precisamente tras este grito, tras este bramido que ahora abierto de par en par el jardín se hace mas intenso, cada vez mas fuerte, ella pide respuestas ante este hecho, porque una vez abierto el jardín y con mi amado metido dentro, ¿Que le habréis de decir si le veis? ¡¡que enferma de amor estoy¡¡
¡Qué interesante, gracias! Pero sí que hay alusión a la puerta cuando se habla de «el pomo (o manilla) de la cerradura». También me parece interesante lo de «mis entrañas bramaron». Es cierto que el verbo en hebreo (hamu) puede significar «gemir», pero también «inflamarse, estremecerse». Y con «entrañas» como sujeto, lo habitual es entender algo como «mis entrañas se estremecieron» o «se conmovieron». Víctor Morla explica que es una expresión relativamente frecuente en la Biblia que sirve para «formular emociones intensas, como amor, pasión, ansiedad, sufrimiento y pesar». ¡Gracias otra vez por el comentario!
Eduardo, te falta el resto de la frase que dice Sulamita, bramaron POR AMOR DE EL, este bramido responde al ciervo joven que viene sobre los montes de la hendidura, por eso dice Sulamita: Se »semejante» a un joven ciervo sobre los montes de la »hendidura», haciendo alusión a este joven ciervo, dice la amada, »mis entrañas bramaron», el amado presuroso se dispone una vez que van despareciendo las sombras y la brisa del día empieza a esparcir las fragancias de la amada, a bramar en sus entrañas, la expresión »por amor de el» o »a causa de el» no se puede quitar, no se puede decir mis entrañas bramaron y concluir así la frase, porque Sulamita dice que sus entrañas braman por una causa especifica, no braman porque el amado haga ruidos en la mítica puerta, no dice »le escuche andar en el candado de la puerta y me asuste o me sobrecogí», dice afirmando que es sobrecogida cuando el amado tiende su mano a través de la apertura o de la hendidura, NO de la puerta, sino a través de la apertura ¡¡¡DEL HUERTO¡¡ pues es donde el amado quiere entrar, viene diciendo claramente »entrare en mi huerto, esposa hermana mía, y recogeré mi mirra con mis aromas etc, este huerto esta »cerrado» huerto cerrado eres, Sulamita ha de abrir este huerto, y por la pequeña hendidura que ella acaba de hacer el amado puede acceder al mismo, ella con sus propias manos esta abriendo el cerrojo, las manos de Sulamita son las llaves del cerrojo, de ahí la mirra que es destilada por las mismas manos a modo de llaves con las que abre el huerto completamente, el cerrojo es el cerrojo del huerto y sus manos las llaves del mismo, porque estamos hablando del huerto no de una puerta física, aquí el amado es muy claro cuando pide entrar en ¡¡el huerto¡¡ ella tiene cerrado su huerto y lo abrirá con sus propias manos, curioso es que en este verso hay dos manos, la mano del amado tendida disponiéndose a entrar por la abertura del huerto, y las manos de ella abriendo el huerto, que es ella misma, y es entonces cuando el amado grita en el huerto: ¡¡ESTOY ENAMORADO DE TI AMADA MÍA¡¡¡ este grito es causado por el amor que el amado siente hacia ella, eliminar la frase »por amor de el» es contradecir el Cantar mismo, el bramido es causado única y exclusivamente por el amor que siente el amado hacia la doncella, no al revés, sino ella diría me conmocione por el amor que yo le tengo, pero la conmoción es al contrario, es por el amor que el tiene hacia mi persona, es bramido causado por el sentimiento que el amado tiene, tal como relata la escritura, poner corazones donde hay entrañas, y sustos donde hay bramido es quitar el Cantar de todo su contexto, es el amor del amado el que causa el bramido como si un joven ciervo se tratase en las entrañas de la misma Sulamita, y es precisamente por este bramido que ya habla en sus entrañas, este decir, este gritar, detras este »hablar», no detras del amado,que Sulamita una vez abierto el huerto va haciéndose mas profundo que ella sale como un suspiro detrás de respuestas por esta forma de »hablar», antes le escuchaba »fuera» ahora le escucha »dentro», por eso dice literalmente mi amado »se posiciono en otro lugar» »paso» esto es, se posiciono en sus entrañas, dentro del huerto mismo, ábreme para que yo pueda entrar en tu huerto que es tu persona, si Sulamita es el huerto, lo lógico es que el amado tome posición dentro de su persona una vez abierto, pues el es muy claro cuando le dice »ábreme» o lo que es lo mismo »déjame entrar» ¡¡al huerto¡¡ , se que es de difícil comprensión pero para eso es Cantar de los Cantares y no una copla de Isabel Pantoja.
Gracias por leerme, Maria.
Gracias a ti por escribir, María. Yo veo las cosas de otro modo; como decía en el comentario, creo que el Cantar es demasiado «polisémico» como para interpretar lo que dice de forma unívoca o lineal. Por eso, no me parece que el huerto sea la clave de todo el pasaje. Creo que no debe pasarse por alto el «paraclausithyron», el motivo del enamorado junto a la puerta cerrada de la amada, a quien pide que le abra, tan extendido por tantas literaturas. Lo cual no quiere decir que solo debamos entender eso, como decía… Por otro lado, no es que haya quitado la expresión «por él»; es que estaba hablando solamente de la traducción del verbo «hamu». ¡Gracias otra vez!
Aunque normalmente este libro se interpreta de forma alegórica (Cristo y la Iglesia) para evitar decir que la Biblia contiene erotismo, difiero de esa interpretación. Lo que tú describes es la interpretación acertada. En el libro hay 3 personajes principales, el joven pastor, la muchacha, y el rey Salomón. La historia describe el matrimonio entre el pastor y la muchacha y el rey tratando de apropiarse de ella. La historia sí contiene erotismo, puesto que es lo natural dentro del matrimonio; eso es lo que describe Cantares, la relación íntima entre la pareja; lo cual no es opuesto al resto de la enseñanza Bíblica con respecto al sexo. Por eso está incluido este libro en la Biblia.
Pudieron masturbarse cada uno a través de la puerta. Así lo entiendo mejor.
Yo no lo veo, la verdad…